miércoles, 30 de mayo de 2012

Reglas Básicas


Para jugar al póker necesitas un mazo de 52 cartas (sin jockers o comodines).
Objetivo del juego
Tu objetivo será formar la mejor combinación posible con cinco cartas. Esta combinación estará formada por 2 cartas de tu mano (son cartas que te repartirán y únicamente verás tú) y por tres cartas de las cinco que son comunes a todos los jugadores.
Quien tenga la mejor combinación será quien se llevará el bote constituido por las apuestas de los jugadores..

Reparto de cartas

En cada partida debe haber entre 2 y diez jugadores. En los grandes torneos hay más de una mesa pero nunca deben superar los diez jugadores por mesa. Antes de empezar la partida cada jugador deberá robar una carta, el repartidor de cartas (llamado también dealer, croupier o botón) será el jugador que obtenga la carta más alta. En el póker online las cartas son entregadas automáticamente por la aplicación.
El jugador que se encuentra a la izquierda del repartidor será quien empiece a jugar. La ronda seguirá las agujas del reloj.

Apuestas obligatorias (Blinds)

Las Blinds o ciegas son las apuestas obligatorias con las que se empieza el juego. La “ciega pequeña” (small blinds) es la apuesta obligatoria que hace el primer jugador situado a la izquierda del repartidor. La “ciega grande” es la que realiza el segundo jugador. La ciega grande será el doble que la ciega pequeña.
En torneos de nivel más avanzado se realiza una apuesta llamada “Ante” antes de que el repartidor reparta las cartas. Representa un pago que te da derecho a jugar ya que has participado en la formación del bote.

Apuestas libres
Las apuestas libres son aquellas que cada jugador anuncia a sus oponentes en su turno de palabra. Los jugadores escogerán entre:
·         Retirarse: abandonar el juego
·         Pasar o check: no apostar en una ronda pero seguir en el juego.
·         Igualar, pagar o Call: igualar la apuesta de los jugadores anteriores para seguir jugando.
·         Apostar o bet: hacer una apuesta para obligar a los oponentes a retirarse o a seguir jugando.
·         Subir: hacer una apuesta superior a las de los otros jugadores.
·         Farol o Bluff: subir para hacer creer a los demás que se tiene una buena mano cuando en realidad no es así. El objetivo es que otros jugadores se asusten y decidan retirarse.

Desarrollo de una mano

Una mano de póker se divide en 4 fases. Antes de que el repartidor (croupier, dealer o botón) reparta las cartas, los dos jugadores de su izquierda deben realizar una apuesta obligatoria (Blind o ciega). El sentado inmediatamente junto al dealer pone la “ciega pequeña” y el segundo a su izquierda pone la “ciega grande”:

Fase 1: Pre-flop

En la mano de inicio o Pre-flop, se reparten dos cartas bocabajo a cada uno de los jugadores. Serán las cartas propias o privadas de cada uno.

Fase 2: Flop

El crupier coloca 3 cartas boca arriba en el centro de la mesa. El conjunto de 3 cartas se llama flop. Serán las cartas comunitarias.

Fase 3: Turn

El croupier enseña boca arriba una cuarta carta comunitaria, el turn.

Fase 4: River

Se enseña una quinta carta comunitaria para completar la mano: el river.
Después de cada ronda de reparto de cartas (4 rondas) hay una ronda de apuestas. En la primera ronda de apuestas, los jugadores pueden igualar la ciega grande para seguir el juego, subir o retirarse.
En las siguientes rondas, cada jugador también puede igualar, subir, pasar o retirarse. Cuando las cinco cartas comunes están en la mesa se dice que la mesa está completa.
Con las cinco cartas comunes y las 2 cartas propias cada jugador formará la mejor combinación posible de cinco cartas. Después del river, los jugadores que siguen en la mano descubren sus cartas.
Gana el que tiene la mejor combinación de cartas. Quien gane, se lleva todas las fichas puestas en la mesa durante las 4 rondas de apuestas anteriores. Se comparte el bote en caso de empate.




La posición en la mesa


En la mesa de póker, la posición que tengas puede ser una ventaja estratégica frente a los otros jugadores. Y es que la frase “Posición es poder” cobra especial importancia en este juego.
La posición en la mesa de póker se define en función del Dealer o repartidor, también llamado button o botón, y siempre en sentido de las agujas del reloj. El primero en apostar es el ubicado a la izquierda del Dealer y corresponde a la Ciega pequeña, al siguiente jugador le toca la Ciega grande. Después vienen las primeras posiciones, las intermedias están al frente del Dealer y las tardías a su derecha.
Es importante conocer las ventajas y desventajas de cada una de ellas, porque en el póker las posiciones van rotando, por lo que estaremos en distintas situaciones para cada mano.
Sin duda, la posición menos ventajosa la tiene el que “habla” o actúa primero en la ronda de apuestas, porque no tiene forma de saber las cartas que tienen los otros jugadores.
Si estás ubicado a la izquierda de la Ciega grande, es decir Under the gun (UTG), serás el primero en hablar y lo recomendable es apostar cartas realmente fuertes, como AA, KK, QQ o AK; de lo contrario, te tocará retirarte después de la primera ronda en caso de que se hayan subido las apuestas.
Este consejo también es válido para las otras primeras posiciones y las intermedias, porque deben estar atentos a las subidas pre-flop.
En cambio, las posiciones tardías son las que cuentan con más información al momento de apostar. Si te corresponde jugar como Cutoff (CUT), ubicado antes del Dealer, o como el propio Dealer, conocerás cuántos jugadores participan, cómo juegan, su reacción al ver sus cartas y sus apuestas.
Pero no te confíes al estar en esta posición. Debes permanecer siempre atento para provechar la ventaja que tienes en caso de que se presente la oportunidad de farolear o robar las ciegas.
Mientras, la Ciega pequeña y la Ciega grande (Small Blind o SB y Big Blind o BB, respectivamente) son las posiciones más conflictivas, porque son los últimos en hablar en la primera ronda y deben compensar la desventaja de la apuesta obligatoria.
Para las rondas posteriores, serás el primero en hablar si estás de SB o BB y no tendrás información sobre lo que harán los otros jugadores.

Las combinaciones en el poker


Si deseas ganar en el póker es imprescindible que conozcas el valor de las manos que tengas. Aquí de ayudamos a identificar cuáles son las combinaciones de cartas que te permitirán farolear o sentirte seguro para subir tu apuesta. Las encontrarás en orden de importancia, desde la más fuerte a la más débil.
Escalera Real
Se trata de formar una escalera con cartas del mismo palo, desde el As hasta el 10. Esta combinación también lleva el nombre de “Flor Imperial” o “Royal Flush”.

Escalera de color

Como su nombre lo indica, es una escalera con 5 cartas del mismo palo. A esta combinación se le conoce, además, como “Straight Flush”.


Póker

La idea es conseguir cuatro cartas del mismo valor o “Four of a Kind”, y la más fuerte es la formada por Ases. Esta combinación es la más característica del póker.

Full

Debes combinar tres cartas de un mismo valor con otras dos iguales de valor diferente.

Color

El “Flush”, como también se conoce esta combinación, son cinco cartas del mismo palo, pero sin importar si son consecutivas o no.

Escalera
La escalera o “Straight” son cinco cartas consecutivas y en orden ascendente, pero de diferente palo.

Trío

Para formar un trío o “Three of a Kind” debes obtener tres cartas de un mismo valor y combinarlas con otras dos diferentes.

Doble pareja

Se combinan dos cartas del mismo valor con otra pareja de cartas en una misma mano. Si ocurre un empate entre jugadores, ganará el que tenga la pareja más alta.

Un par

El par o pareja son dos cartas del mismo valor y tres cartas diferentes. La combinación más fuerte es la pareja de Ases.

La carta más alta

En caso de que ningún jugador tenga alguna de las combinaciones anteriores, es necesario conseguir la carta más fuerte para obtener High Card o la carta más alta.








El tamaño de las apuestas



¿No sabes cuánto apostar? En el poker, tu apuesta debe ser proporcional al tamaño del bote. Por eso, antes de realizar una apuesta debes conocer a cuánto asciende la cantidad apostada en cada ronda de juego.
De esta forma evitas las consecuencias negativas que generan las apuestas pequeñas: animas a otros jugadores con manos débiles a seguir en el juego, con el riesgo de que su mano mejore y puedan ganarte.
Lo ideal es que si tienes una mano muy buena, tu apuesta debe ser mayor; por lo que la estrategia que sigas determinará tu éxito o fracaso en el juego. Igualmente, la posición que tengas en la mesa es importante para determinar la dimensión del bote.
Sigue estas recomendaciones y conseguirás mejorar tu habilidad para apostar y cambiar el tamaño de las apuestas.

Pre-flop
Tras las apuestas obligatorias (Ciega Pequeña y Ciega Grande) y de haberse repartido las cartas, llega el momento de la primera ronda de apuestas. Debes tener en cuenta que la apuesta que hagas es una excelente arma para engañar a tus rivales.
Si tus cartas son buenas, puedes igualar la Big Blind o subir las apuestas (raise). La subida estándar preflop es tres veces la Big Blind, si nadie entró en el bote antes de que te toque jugar. En el caso de tener cartas débiles, debes evaluar la posibilidad de igualar para esperar ver cartas comunes interesantes o no arriesgarte a perder y retirarte.
Flop
Luego de que el Dealer ha descubierto las 3 cartas comunes, debes poner en práctica tus habilidades para apostar y controlar el tamaño del bote en función de tu mano. También puedes aprovecharte de la posición que tengas.
Teniendo cartas fuertes y el primer turno en actuar, tu interés debe estar en ampliar el bote subiendo tu apuesta y obligando a tus adversarios a retirarse, igualar o incrementar lo apostado. Si no estás en posición, debes apostar y esperar a que se igualen o suban las apuestas.
La apuesta, en esta etapa, debe alcanzar las tres cuartas partes del bote. Por ejemplo, si en el bote tenemos 200€/$, tu apuesta debe ubicarse en torno a los 150 ó 200€/$. De esta forma logras el objetivo de sacar del juego a los que tienen manos débiles o de pagar para completar la jugada.
Mientras, una mano que no te guste debe llevarte a mantener el bote pequeño. Esto lo logras haciendo check, aunque esta estrategia no garantiza que el resto de los jugadores no apuesten.

Turn

En esta fase del juego, cuando el Dealer coloca la cuarta carta descubierta, la estrategia que uses y la posición en la mesa son clave para proteger tus cartas. Si tienes cartas fuertes, pero crees que tu oponente también las tiene, debes obligarlo a defender su mano con una apuesta alta.
En cambio, si te sientes seguro de tu mano, puedes hacer apuestas pequeñas para que igualen de forma fácil. Así siembras la duda en los jugadores de la debilidad de tus cartas y podrás guardarte una apuesta de valor para el River.
En caso de no tener la mejor mano, es el momento de decidir si continúas apostando para igualar o pasar, y ver si llegas a la quinta ronda.

River

Una vez que se ha colocado la quinta carta comunitaria, puedes apostar por última vez. Haz una subida pequeña si crees que tu mano tiene grandes oportunidades, así garantizamos que los adversarios pagarán por pot odds. Esto es una apuesta de valor (value bet).
El faroleo puede ver sus frutos en esta ronda, porque si aumentas la puesta y los otros jugadores abandonan la mano puedes ganar el bote sin mostrar tus cartas.


El pre-flop


Un buen jugador de poker planifica su estrategia de juego desde el principio, es decir antes del flop. Pero… ¿Cómo lo hacemos? En el desarrollo de la estrategia durante la primera ronda de apuestas intervienen varios factores: las cartas que tenemos, los jugadores que participan, las fichas con las que contamos, la posición y las acciones previas.
La agresividad con la que juegues es fundamental si tienes una buena mano. En ese sentido, debes aprovechar la ventaja que tienes y apostar alto para evitar que otros rivales entren en juego y logren una buena combinación.
No tengas miedo de exprimir a tu oponente si te toca AA, KK o QQ, que son las mejores cartas que puedas tener en el poker sin importar la posición que tengas. Comienza con buen pié y apuesta fuerte desde el principio.

Tampoco debes dudar en retirarte en caso de tener manos débiles. Recuerda que para ganar al poker debes tener buenas cartas.
También influye el número de jugadores que participen en una mano. Tienes más posibilidades de llevarte el bote en la medida que se reduzcan los jugadores implicados en el juego. De allí la importancia de subir las apuestas para ampliar el bote si tienes las de ganar con las cartas, porque frenarás el avance de tus oponentes con manos débiles.
Igualmente, la cantidad de fichas o stack que tengas determinará tu juego. Si tu stack es alto, tendrás recursos suficientes para defenderte con astucia. Y es que un gran stack te permite la posibilidad de farolear y aumentar tu apuesta si no cuentas con una buena mano.
Tu posición en la mesa es otro aspecto importante a considerar. No olvides que hay posiciones más ventajosas que otras, como el Cutoff o el Dealer, que son casi los últimos en hablar. En alguna de estas posiciones tendrás más información antes de apostar, frente a las primeras, en las que estarás limitado porque sólo conocerás tus cartas. Lo recomendable en este caso es reducir nuestras actuaciones a menos que tengamos una buena mano.
Y si otros jugadores han apostado antes que tú y han subido la apuesta, nunca debes hacer call o igualar si posees cartas fuertes en preflop. De igual forma, si haces call, tienes AJ o KQ y un jugador supera tu apuesta, debes considerar la posibilidad de retirarte porque seguramente tendrá una pareja superior a la tuya.
En resumen:
·         1) Apuesta fuerte si tienes una pareja buena, independientemente de la posición que tengas.
·         2)Estudia tu posición, tu stack y el número de jugadores en caso de que tengas una mano regular.
·        3) Si tienes una buena pareja, debes intentar eliminar a tus oponentes desde el principio para que tus posibilidades de ganar aumenten.



El flop o Post-flop


Si comienzas bien en pre-flop sigue igual en el flop. De esta forma garantizarás que tu estrategia sea consistente a lo largo del juego y tendrás más opciones de ganar, además de conseguir un buen bote.
En el flop, una vez repartidas las tres cartas comunitarias, podrás realizar una nueva apuesta. Dependiendo de las cartas que tengas, debes adoptar una estrategia más agresiva o más pasiva.
Debes subir tus apuestas si consigues en el flop una pareja fuerte con un alto kicker (carta de desempate), para así eliminar la opción de que otros jugadores salgan con manos mejores y aumentar la cantidad del bote.
Igual debes actuar de lograr una doble pareja alta, la segunda pareja de la mesa o la peor, aunque en los dos últimos casos debes ser cauteloso por si suben las apuestas (reraise) ya que no tienes la más alta.
También debes aumentar si sacas en el flop un trío con pareja en mano o con una pareja en la mesa, así como una o dos cartas para escalera.
Si por el contrario no sacas nada en el flop pero tienes en mano dos cartas altas, puedes optar por igualar en caso de que hayas empezado con una subida en pre-flop. Y si suben las apuestas, debes retirarte porque no tendrás opción en turn y river.
Juega lento con apuestas bajas (slowplay) si consigues completar un full o si tienes escalera pero sin posibilidad de color.

En el flop también es importante la posición que tengas, ya que será diferente que en pre-flop, especialmente para la Ciega Pequeña. Mientras que en la primera ronda la Small Blind habla en posición tardía, en el flop hablará de primero.
Si eres la Ciega Pequeña, debes tener en cuenta que la situación no es la misma que en pre-flop, pues ya tienes tres cartas en la mesa y ningún jugador ha hecho una apuesta. Así que tu apuesta será mejor valorada porque tienes más información.
Pero indudablemente, el que posee la mejor posición en esta fase es el Dealer, porque será el último en hablar. Como Dealer, tendrás más oportunidades de farolear por la información que has obtenido de los otros jugadores y de sus manos.
No olvides que será más efectivo lanzar un farol en las posiciones tardías que en las primeras. De lo contrario, sería muy arriesgado hacerlo entre las primeras posiciones por la falta de información.
Recuerda que si tienes una mano fuerte, debes subir tu apuesta en el flop. Sé cauteloso si no tienes buenas cartas y subes las apuestas después de que hables; y aprovecha tu posición para farolear.


La varianza



Aunque el poker no es un juego de azar y tu habilidad en la mesa juega un papel importante, no es cierto que puedas ganar el 100% de las manos porque seas un buen jugador de poker. Además, la expresión “tengo mala suerte” es más frecuente de lo que te imaginas entre los jugadores de poker cuando pierden una mano teniendo cartas fuertes.
La mala racha o mala suerte es natural y debes aprender a asumirlo sin caer en el error de apostar más de lo debido, porque no se han cumplido tus expectativas de ganar. Tendrás ciclos en los que ganarás con cartas regulares y perderás con cartas muy buenas, aún siendo favorito.
Por eso debes familiarizarte con un concepto: La varianza. Se trata de calcular la dispersión de tus resultados con respecto al valor esperado. Suena un poco complicado, pero simplificando el proceso es el cálculo que debes hacer para medir lo lejos que estás de lograr resultados positivos.
Es decir, debes evaluar las probabilidades reales de ganar con determinada mano de cartas, así como los altibajos que se presentarán. Lo importante es no considerar como malos los resultados negativos conseguidos en el juego, porque en el poker hay desviaciones y los ingresos no son regulares.
Por ejemplo, con AA en pre-flop tienes el 90% de probabilidades de ganar la mano si tu oponente lleva AK. Esto indica que existe un 10% de probabilidad de perder el juego, por lo que de vez en cuando te tocará perder con buenas cartas… Es la varianza.
Uno de los efectos psicológicos que genera en algunos jugadores es la frustración por estar en mala racha, impidiéndoles volver a concentrarse y despegar de nuevo en el poker. Para protegerte de este tilt o estado anímico debes aceptar que existen oscilaciones en el juego.
También debes evitar jugar si continúas presentando este peligroso estado emocional, porque aumentarás tus pérdidas al hacer jugadas absurdas para intentar recuperar lo perdido.
Cuando te sientas así toma un descanso y despeja tu mente. Diviértete con tus amigos, ve al cine, sal a caminar o lee un buen libro. Seguramente volverás libre de preocupaciones y con mejores ánimos para jugar.